Era una pregunta con parte de afirmación. Me dejó pensativa, y no ssabía bien que responderte.
La realidad es que los fantasmas son de verdad, los creamos y mientras no los enfrentamos. Tienen fuerza, presencia, control, y mucha tranquilidad. Nos observan fríamente mientras les damos forma, nosotros les otorgamos la vida,
Los fantasmas son de verdad, pues nacen, viven y se reproducen. Se alimentan de nuestros miedos, manteniéndose vivos y creando unos nuevos.
La única manera de destruirlos, de que sean mera imaginación, es enfrentarlos, plantares cara y no dejarles hacerse dueños de nuestras inquietudes.
Los fantasmas van cambiando, casi a la par que nosotros. Evolucionan, algunos se destruyen y otros se renuevan. Algunos se hacen viejos, y caminan con nosotros, no permitiendo que les olvidemos.
Imponen miedo, temor. Se hacen dueños de todo lo que nos rodea, haciéndonos perder nuestra identidad. Algunos personas aprenden a convivir con sus fantasmas, a que sea invisibles para los demás, pero ello no les resta veracidad.
Después de darle vueltas y más vueltas, la miré y le dije.... "pequeña, los fantasmas no existen"
Sonrió y se fue corriendo a jugar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario