jueves, 5 de febrero de 2015

Aceptar

No soporto a esas personas que no aceptan las consecuencias de sus actos. Así soy de categórica. No puedo, aunque lo intento, con esa gente, y menos en el trabajo.  No aguanto su manera de comportars,  que preguntes por "aquello" y su respuesta sea "no sé,  eso es de fulano"
Ante tal respuesta te quedas con cara de mono, cuando entrabajaba el jefe y le dice lo mismo, ante lo que responde "ahora voy, antes no pude"
Ya sé,  que me diréis que eso es un pelota en toda regla, cosa que no voy a negar. Este hecho lo califica y demuestra de que pie cojea. Esto debiera darnos una pista de como reaccionaría al tener o intentar tener una conversación referente al trabajo. Y aun así la tengo y digo lo que pienso.
A mi, mi madre me enseñó a hacer todo en la vida de tal manera que fuese vista o estuviese sola. Me inculcó a que hiciera las cosas bien, o lo intentase, tanto en el trabajo como en cualquier faceta o empresa que emprendiera. Y si por cualquier motivo salieran mal, aceptar nuestros errores, y sus consecuencias.
Los errores son parte de la vida, de nuestro aprendizaje. Los errores se cometen, pero debemos ponerles remedio, intentar no volver a cometerlos, o si los cometemos aceptarlos, porque nadie es perfecto y yo menos.
Aceptar nuestras equivocaciones, es una de la mejor manera de aprender, de mejorar. Si nos creemos siempre en el poder de las mejores acciones, que nunca nos equivocamos, y no reconocemos los fallos y las consecuencias de ellos, mejorar y crecer es una utopía, algo que nunca ocurrirá.
Todo acto y decisión  tiene consecuencias, tanto si son aciertos como errores......

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