Constantemente en los medios de comunicación se hace referencia a la igualdad entre hombres y mujeres, que si debiera de existir un cupo de mujeres en una empresa, etc. Más que intención de solucionar esa igualdad ficticia que hay, me da la impresión, que es un tema político o social con los que los diferentes poderes del país juegan.
No creo que exista tal igualdad, como nos la quieren vender, y me extraña que algún día exista. Los hombres son hombres y las mujeres, mujeres. Es una olvidad, lo se, quiero decir que la sociedad está distribuida como esta y es difícil de cambiar, aunque no imposible.
Lo de los cupos en las empresas me parece de broma, pues cuando una mujer ascienda, siempre estará la duda de que apelar de su valía su ascenso se produce por su sexo. Eso no exime que en muchos casos sea así.
Las mujeres podemos desempeñar los mismos puestos que ellos y viceversa, al igual que no todos los hombres podrían hacer el mismo trabajo. Creo lo que tiene que primar es la valía de cada uno, sin mirar condición raza o sexo, y eso es una utopía.
Debiéramos de desterrar muchas ideas preconcebidas, como que todas las mujeres sabemos cocinar, o coser un botón, hay que nos dan mil vueltas. O que para un trabajo de esfuerzo físico una mujer no valdría...
Lo estoy llevando todo al terreno laboral, pero en el social y diario también hay esa igualdad solapada. Enseñamos a nuestros hijos@s que son iguales y no es así. Un tío que se lía con muchas tías puede chatarrero de ello sin que nadie se escandalice, en cuanto lo hace una chica, los calificativos periorativos no se hacen esperar.
Ya veis vivimos en una sociedad excesivamente estereotipada, en la que contribuimos directa o indirectamente a que sea así. O nos olvidamos como nos han criados nuestros padres y la diferencia que hacían entre niños y niñas. La diferencia en algunos casos aun se hace hoy, desde la elección de juguetes, carreras universitarias, vestimenta y demás.
Para cambiar una idea colectiva hay que empezar por cambiar la individual. No creo en esa igualdad que nos venden, pero si estoy plenamente confiada en la igualdad de oportunidad y que cada uno sea pueda ser valorado por su valía, no por su sexo, sus tetas o por lo fuerte que sea.
Os animáis a empezar el cambio por esa igualdad?
Verdad, verdad, verdad. Por dónde empezamos? Fdo. Una admiradora
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