Lo que no pienso admitir es que nadie tiene una vida tan perfecta como para no tener ningún problema, o piedrecita en el zapato, o algo que debe en cuando no le deja dormir por la noche. Igual que no acepto esto, no acepto que ciertas personas vendan sus desgracias, para dar pena.
Esa gente que tiene tanto arte, para que los que les rodean se apiade de ellos y les remueva por dentro la desgracia ajena y quieran ayudarles olvidando la suya propia. Estoy a favor de la solidaridad, y de la empatía, lo que pasa esquema ciertos seres se aprovechan sin escrúpulos, de la buena fe de la gente.
Hay personas que hacen del victimismo su forma de vida, que pobrecitos, que desgraciaditos que son, que todo les salgan, que poca suerte tienen en la vida..., y se olvidan de que no sólo se vive de la yuda de los demás sino que de vez en cuando hay que mover el culo. Y además, cuando intentas ponerles las pilas, les sale el carácter, y se ofenden, como si lo que les dices, aunque real y certero, fuese un insulto.
Me gustaría darles un consejo a todas esas personas que creen que solo las desgracias les ocurren a ellos, y digo por desgracias problemas pequeños y sin importancia y fácilmente salvables, no estoy hablando de enfermedades, ni soy quien para frivolizar con los problemas de las personas. Estos victimismos y quienes los padecen son bastantes cómodos, y prefieren culpar al mundo que empezar a afrontar esas pequeñas cosas, pues les funciona ese papel de buenas y con poca suerte.
Me gustaría que mi empatia con ellos no se desvaneciese, pero cuando ves que es pura conveniencia, y que esperan que estés ahí ante todo, y cuando pides un favor por pequeño que sea nunca pueden y encima les tienes que entender.
Basta ya, ni lo tuyo es el fin del mundo, ni mi vida es color de rosa, enfréntate a la vida y quítate la máscara de victimismo. Espabila y ponte las pilas ya.....
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