Veinte segundos de coraje, eso es lo que me han dicho que necesita cualquier ser humano para cambiar eso que nos hace daño, o tomar fuerzas para dar ese salto al vacio.
Siempre pensé que para acopiarse de ese coraje se necesitaba tiempo, paciencia y del momento propicio. Aunque si lo pienso bien, en ese momento en que decimos dar el salto, solo lo hemos pensado unos segundos, y no más de veinte.
Nos pasamos parte del tiempo dándole vueltas a las cosas, como tomar decisiones, o cuando seria el momento propicio, o las circunstancias serán las adecuadas. Y así constantemente sin querer reconocer que simplemente ese instante se produce en pocos segundos. Pondré un ejemplo.
Llevaba unos meses pensando en dejar fumar. Primero fue elegido, que me recomendó que antes de los cuarenta debería dejarlo, por mi bien, que yo ya era mayorcita para decidir lo que hacer. En esto último tenia razón, pués escucho los consejos y despues hago lo que creo conveniente.
Por otro lado, empecé a ser consciente de los muchos cigarrillos que no saboreaba, que eran hábito, y eso me dio rabia, pero no lo deje.
Pasando los meses intente reducir la cantidad de tabaco que fumaba a diario, y funcionó un tiempo, pero solo un tiempo, después otra veza la misma.
Llegó un momento en que creí que jamás conseguiría desprenderme del vicio, que aquello era más fuerte que yo.... Hasta que una mañana., con el cafe en mano y cuando normalmente fumaba mi primer cigarrillo del día, moqueta mirando la cajetilla, siendo consciente de que el tabaco me dominaba y que estaba harta de que así fuera. No creo que pasarán más de veinte segundos, pero no fumé, había decido dejarlo. Ese instante de coraje, esos segundos.... Y así fue, no encendí ese cigarro, no ese día, ni en los posteriores y de eso ya hace más de veinte días....
Cuantos segundos necesitas tú para ese coraje? A mi veinte segundos me sobran..
No lo pienses mucho.... Lánzate.
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