Estos días anda el tiempo revuelto, y parece que la gente también. Tal vez no sean los demás y sea yo. No sé, estoy más sensible de lo habitual, o cansada ya de tanta tontería. No le busco explicación, estoy y soy así. Lo que pasa es que mi lado positivo siempre pesó sobre el negativo, así que encías grises como estos, saco mi paleta de vivos colores y empiezo a pintar todo de naranjas, amarillos, rojos, azules, violetas, verdes.... Y lo que era un día gris termina siendo un día lleno de luz y de color. Y al final cuando hago recopilación del día, me quedo con lo bueno por poco que fuera, y lo malo, lo analizó, por si puedo cambiarlo, y sino directamente a la bolsa de la basura.
Mis días grises, solo lo son un ratito, pero como no puedo fingir, a pesar de que sale el sol, o lo hago salir si o si, deja marca en mi rostro y la mirada aunque la oculto, delata una tristeza y la angustia que no quiero compartir. Prefiero tragarmela, y a cambio sacar una sonrisa, sacudirme lo malo y vestirme con lo bueno....
No soy una ilusa, ni tampoco una tontita, ni estoy ciega... Solamente que con los años he aprendido que la vida se lleva mejor con una sonrisa y con positivismo, aunque ese positivismo y esa sonrisa les cueste salir afuera, siempre termina aflorando.
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